jueves, 19 de abril de 2012

El hambre en Nueva York, de Edith Villanueva

Queridas y queridos:
La propuesta de lectura para esta semana es El hambre en Nueva York, de Edith Villanueva, texto que apareció en La jornada semanal hace algún tiempo y que encuentran en: http://www.jornada.unam.mx/2009/09/06/sem-edith.html.
Como se dan cuenta, cambiamos de tema por algún rato, con el ánimo de disfrutar de otros textos y de regresar a la temática poetiana con más gozo.
Espero sus comentarios.

12 comentarios:

  1. Hijoles, en algunas ocasiones también me he sentido en un mundo irreal... el sistema laboral, por ejemplo, me ha colacado en esos escenarios sólo porque esas "son las reglas" ¿Las relas? ¿las reglas de quien? ¿Para qué esas reglas? y lamentable y tristemente también he cedido. Saludos a todos. Un abrazo

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    1. Has cedido como lo hizo esa madre, narradora de la historia.
      ¿Quién puede decir que no ha tenido que tomar una decisión similar?
      Las normas de la civilización. ¿De cuál civilización? ¿Qué concepto de ser humano está presente en el concepto de esa civilización?

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    2. Ora sí como tú mismo dirías S: qué te digo, semejante al tuyo es mi sentir y me genera un sentimiento de vergüenza e impotencia. Sin embargo creo que no son las reglas en sí, sino cómo nos organizamos en torno a ellas. Creo que lo más frustrante es ver que las reglas se apliquen celosamente en unos casos y en otros no. También me parece que un problema adicional es no prever las situaciones morales que derivarán por la introducción de las mismas reglas, lo que se presenta en el relato es un ejemplo de esto: evitamos que los ciudadanos se instalen en la pereza y pretendan vivir del subsidio público, pero no consideramos que al evitarlo incurriríamos en un perjuicio diferente y quizá mayor.
      Como comentas Nadia, seguiremos en un desarrollo miope, inmediatista, centrado en el control por el control, si no tenemos claro cuáles son los principios ordenadores de nuestra sociedad y el tipo de ser humano que los hará posibles.

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  2. Tal vez podrían comentar algo acerca del lado positivo de esa civilización, de su cara humana, bondadosa.

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    1. ...Pues claro, resulta evidente que, al margen del "sin sentido" de la regla, los niños no tienen que andar hurgando en la basura para poder comer, el programa está dispuesto y de forma bastante abierta para todos ellos. Quizá, como se alude en el relato, acá no hay esos desperdicios -y habrá que valorarlo porque no estoy seguro, mi experiencia me dice que sí los hay- pero nadie acerca lo disponible de modo tan accesible y de forma consistente con la salud, es decir, el menú que se presenta no sólo resulta suficiente para la niña, sino balanceado y saludable.

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  3. Es horrible pensar que esto pase y que sea uno de tantos casos donde somos espectadores de la injusticia, pero es aun peor cuando somos parte de ella y que, aunque uno lo vea y pretenda hacer algo, al fin, por fuerzas mayores ,nos dejamos ir con la corriente, esto está mal y creo que todos lo sabemos , pero hay situaciones, como en el caso de la mujer con su hija, en el que ella tenía una necesidad, darle de comer a su hija o hacer algo porque no desperdiciaran la comida de esa forma, situaciones donde tenemos que decidir entre dos hechos que tienen causas buenas, porqué hacer tomar ese tipo de decisiones tontas y sin sentido, considero que la gente que tiene los medios para desarrollar este tipo de programas, piensen y analicen un poco en como lo llevan a cabo, pues buscan ayudar a cierto grupo de personas, pero crean reglas absurdas que acaba con la posibilidad de seguir ayudando a más gente.

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    1. Decisiones de este tipo, de las que llamamos "entre la espada y la pared" tomamos en muchísimas ocasiones. Creo que lo primordial es tener claro por qué las tomamos, qué hay en el principio y el fin de ellas.

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  4. Suele pasar en muchas ocasiones esto mas entre las clases sociales altas y bajas,aveces piensan que como tienen todo se dan el lujo de desperdiciar en cambio hay otras personas que necesitan todo aquello que desperdician , hace reflexión a uno mismo en la casa de ustedes , sabemos que aveces no sabemos que puede pasar mas adelante, y que al paso que vamos llegaremos a una época donde la crisis económica estará muy mal y no podemos darnos el lujo se ser asi.


    MAURICIO MENDEZ ANELL

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    1. Hola, Mauricio. Te pido que reescribas este comentario para que sea clara tu intención al escribirlo. Gracias.

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  5. Como ser humano aborrezco ese tipo de actitudes, el ayudar al prójimo es un acto de bondad, de amor a uno mismo y hacia los demás.
    Al leer el texto te das cuenta que no esta fuera de lo visto en la actualidad y que es una desgracia ver este tipo de cosas.
    Yo repruebo ese tipo de actos, y cuando puedo ayudar a quien lo necesita lo hago sin recibir nada a cambio. Creo que como sociedad debemos de cambiar esa errónea idea, movilizarnos como pueblo para ayudar a quien no puede.

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    1. Si, eso deberíamos hacer todos. Otro mundo será cuando lo logremos,

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